En los últimos años se ha constatado un aumento considerable de los casos detectados y diagnosticados de TEA. Es posible que este incremento se deba a una mayor precisión de los procedimientos de diagnóstico, a la mejora en el conocimiento y formación de los profesionales o a un aumento real de su incidencia.
En España no existe actualmente un registro oficial de casos de TEA, por lo que no conocemos con seguridad el número de casos que hay en nuestro país. Por ello, manejamos las cifras de estudios epidemiológicos realizados en otras partes del mundo:
A nivel europeo, los estudios disponibles apuntan una prevalencia aproximada del 1% (Autism-Europe aisbl 2015). Sin embargo, en Estados Unidos, el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en su último informe publicado en 2014, estimó una tasa de prevalencia de autismo en 1 de cada 68 nacidos.
Lo que sí se confirma en todos los estudios es la mayor presencia de TEA en varones que en mujeres (en una proporción de 4:1), y que no existen diferencias en cuanto a su aparición entre distintas culturas.